Una pizarra en cualquier sitio de la casa

Una pizarra en cualquier sitio de la casa

Las tendencias para decorar nos llevan a explorar nuevas técnicas y nuevos materiales. Uno de esos materiales es la pintura pizarra.

La pintura pizarra la podemos preparar en casa con unos simples ingredientes:

• Pintura acrílica, del color que más nos guste (negra, verde o de colores).
• Agua caliente
• Yeso en polvo
• Recipientes mezcladores
• Cucharas descartables

Habitualmente las pizarras son de color negro o verde oscuro, pero se puede adaptar a cualquier color.

Necesitamos 60 mililitros de pintura acrílica más media cuchara de yeso y una cuchara de agua caliente. En un recipiente la medida de yeso, añadimos la cantidad de agua necesaria y mezclamos hasta que no queden grumos.

Una vez hecha la preparación anterior, con mucho cuidado medimos la cantidad de pintura acrílica del color que vamos a utilizar para realizar la pintura pizarra y se añade a la mezcla anterior , a continuación se mezcla muy bien hasta conseguir una consistencia uniforme y homogénea.

Ya hecha la mezcla, nos disponemos a pintar sobre la pared elegida. Será necesario aplicar dos manos de pintura pizarra dejando secar entre mano y mano.

No estaría de más si queremos obtener un mejor resultado, una vez esté seca la primera mano, lijar con cuidado la superficie antes de aplicar la segunda mano de pintura.

Así de sencillo es hacer tu propia pizarra para la cocina o para la habitación de los niños, que seguro que les encanta poder pintar todas las veces que quieran sin miedo a que se les llame la atención.

*Si la pintura de pizarra es comprada, es muy sencilla su aplicación, simplemente hay que tener en cuenta unos pequeños detalles:

• No diluirla
• Aplicarla sobre un fondo blanco, así nos aseguramos de que el acabado sea el elegido.
• Después de aplicarla espera una semana antes de pintar sobre la pared, para dejar tiempo suficiente para que la pintura endurezca y se convierta en una autentica pizarra.
• Utiliza tizas blancas o de ese tipo, ya que son las más adecuadas para no que no dejen rastros.
• Para limpiarla, con un paño húmedo será suficiente.
• Si se aplica sobre una superficie barnizada o lacada, es necesario lijar antes y aplicar una base selladora.