Las fosas sépticas
Una fosa séptica es un artilugio para el tratamiento primario de las aguas residuales domésticas. En ella se realiza la separación y transformación físico-química de la materia orgánica contenida en esas aguas.
Es absolutamente necesario construir una fosa séptica en lugares que no tienen acceso a la red de saneamiento centralizado, como pueden ser zonas de baja densidad de población o lugares aislados.
Cuando ocurre eso es necesario instalar sistemas de saneamiento in-situ como una fosa séptica para el almacenaje y tratamiento a fin de evitar la contaminación de los suelos.
Las fosas sépticas son unidades de desagües domésticos, donde se combinan procesos físicos y procesos biológicos.
Entre sus funciones están:
- Remover la mayor cantidad de sólidos que integran el agua residual domestica.
- Descomponer estos sólidos en la cámara séptica.
- Retener también aquellos sólidos que no se descomponen.
Los procesos biológicos que ocurren en una cámara séptica con principalmente anaerobios (sin la presencia de aire), consiste en la acción de bacterias capaces de transformar la materia orgánica presente en las aguas residuales.
¿Cómo hacer un buen mantenimiento y limpieza de la fosa séptica?
- La fosa séptica debe ser llenada de agua cuando se comience a usar.
- El tubo de ventilación debe estar correctamente ubicado, para asegurar la evacuación de los gases de fermentación en especial el metano. Respirar esto gases provoca desvanecimientos.
- Nunca fumar o encender fuego durante el vaciado de la fosa séptica ya que hay gases inflamables.
- Terminadas las tareas de limpieza, hay que asegurarse de que las cámaras de inspección y tapas han quedado bien puestas, asegurando la estanquidad de todos los elementos.
Realizando un buen mantenimiento de la fosa séptica nos asegura su buen funcionamiento evitando problemas como malos olores, contaminación del suelo y desbordes.
Fuente: about-haus.com
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