El ladrillo anti-sísmico
El ladrillo anti-sísmico, es un producto de origen español y se puede utilizar en todo tipo de edificaciones, tiene muchas ventajas con relación a los ladrillos tradicionales, entre las que podemos destacar la reducción de los tiempos de construcción, mayor precisión a la hora de colocarlo y mayor resistencia a la vibración.
Estos ladrillos, van encastrados unos con otros, llevan unas varillas metidas en las oquedades troncocónicas de los ladrillos de la hilera inferior y apoyados con sus cuatro patas, dejando una separación entre ellos para el relleno de la argamasa. Una vez seca la argamasa, se forma una bloque sólido, aportando mayor resistencia a la destrucción por empuje, vibración o expansión.
Estos ladrillos tienen la misma medida que los ladrillos tradicionales por lo que puede ser utilizado en las mismas situaciones que el tradicional, además tiene el mismo aspecto y se puede hacer uso de los dos ladrillos en la misma construcción.
Este ladrillo se construye en un molde, lo que permite grabar formas o detalles sobre sus caras.
Fuente: http://www.cosasdearquitectos.com
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