Resulta una difícil elección el optar por baño o ducha.
Vamos a hablar de las diferencias entre la ducha y la bañera. Para eso nos vamos a fijar en la definición que da de cada una de ellas la Real Academia Española.
Ducha, agua que, en forma de lluvia o de chorro, se hace caer en el cuerpo para limpiarlo o refrescarlo, o con propósito medicinal. Aparato o instalación que sirve para ducharse.
Bañera (baño), acción y efecto de someter el cuerpo o parte de él al influjo intenso o prolongado de un agente físico, ya sea calor, frío, vapor, sol, lodo, etc.
Veamos alguna de las diferencias más llamativas:
La ducha es más rápida (ahorrando agua).
Arrastra las impurezas y el jabón rápidamente.
Es más higiénica que el baño.
Además con el chorro de agua se tonifica la piel.
El acceso a ellas es mucho más fácil que a las bañeras.
Más seguras a la hora de pensar en las personas mayores o que tengan algún problema de movilidad.
Las bañeras ocupan más espacio dentro del cuarto de baño.
Resultan ideales para relajarse con un buen baño o masaje.
El baño mejora el ritmo cardiaco
Si combinamos el baño con sales, aceites específicos, esponjas, jabones, geles y cremas mantendremos nuestra piel perfectamente cuidada.
Valorando las diferencias podríamos decir que las dos son necesarias, teniendo la posibilidad ponga una bañera y una ducha en su vida.
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