La casa más cara del mundo
Según el libro Guinnes de los Records, la casa más cara del mundo fue puesta a la venta el año pasado por una cifra de 250 millones de dólares. Hasta el momento no ha habido un anuncio por un precio superior. Pero ¿qué tiene esa mansión para que alguien pueda desembolsar dicha cantidad? Pasamos a enumerar algunos datos que pueden ayudarle a decidir si merece la pena pagar esos millones.
- Su ubicación. Situada en el vecindario de Bel Air, Los Ángeles, Estados Unidos. Considerado uno de los barrios más lujosos del mundo.
- Su amplitud. La casa, con forma de villa mediterránea de 3.000 metros cuadrados está construida en Beverly Hills en una finca de 2.6 hectáreas
- La distribución de los espacios. Todos los miembros de su familia, incluso los primos más lejanos podrán acomodarse en alguno de sus 29 dormitorios.Además, no tendrán que compartir baño, ni tan siquiera los amigos que vengan a comer, ya que tiene un total de 40.
- La intimidad de la que podrá disfrutar y la sensación de seguridad, ya que incluye un foso cristalino que separa la mansión del resto del mundo.
- Las vistas desde la casa son espectaculares, podrá disfrutar desde los rascacielos del centro de los Ángeles, pasando por las colinas donde se alza el Museo Getty, hasta las costas de Malibú.
- Su sala de cine privada, que será la envidia de La Gran Vía madrileña, con sus 40 amplísimas butacas de cuero reclinables, con detalles exclusivos, como cojines, mantas…
- Su habitación de juegos tiene unas dimensiones increíbles; con bolera, futbolines, incluso zona de dulces…”el sueño de cualquier niño”
- Sus zonas de baño: cinco piscinas, cuatro exteriores, una con pantalla de cine, para las noches de verano y otra cubierta en su interior.
- Otros muchos lujos: Sauna, campo de golf, gimnasio, helipuerto, discoteca, casino, biblioteca, incluso una sala de meditación iluminada con paredes/acuario llena de medusas.
- Y, por último, por si alguien sigue pensando que le falta algo, el garaje con capacidad para albergar hasta 30 vehículos.
Si continúa dándole vueltas a la cabeza porque echa de menos algo, puede ponerse en contacto con Bruce Makowsky, el magnate que la diseñó.
Fuente imagen: elpais.com
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