Ducha para jardín

Ducha para jardín

Las duchas para jardín son muy sencillas y fáciles de montar.

Lo primero es elegir el modelo de ducha, en nuestro caso elegiremos un modelo que irá sujeto a la pared.

Después decidimos la ubicación de la ducha, pero hay que tener en cuenta, donde hay una toma de agua o manguera para poder acceder al agua.

Las duchas de jardín suelen tener un palo largo para ser clavado en el suelo, también estaría bien colocar una rejilla de madera en el suelo, para no tener que poner los pies en el césped y así evitar resbalones.

Para fijar la ducha a la pared o a cualquier otro accesorio, necesitamos unos soportes, para ello debemos medir el grosor del tubo, de esta forma vamos a tiro fijo con la medida que necesitamos de soporte.

Marcamos una línea en donde va a ir la ducha, a continuación, con un taladro hacemos dos agujeros para poder colocar los soportes.

Con un martillo colocamos los tacos y después atornillamos los soportes en la pared.

Por último conectamos la ducha a la manguera o a la toma de agua y comprobamos que todo esté bien instalado.

Si el resultado es un éxito, lo mejor que se puede hacer, es disfrutarla.